“Cesta a bordo”: cinco consejos para llevar en coche la cesta de Navidad y que llegue de “una pieza”

Con la Navidad a la vuelta de la esquina, es momento de que muchos españoles reciban su esperada cesta de Navidad, pero ¿cuántas de ellas llegan de una sola pieza? Euromaster ha diseñado la iniciativa “Cesta a bordo” (enlace a vídeo) con consejos para volver a casa en coche y evitar malos comportamientos que la pongan en peligro. El trasfondo es sumar pequeños gestos en beneficio de la seguridad vial, también en estas fechas.

Deja la moto para otra ocasión

Moverse en moto o, incluso, en bicicleta o patinete, ayuda a reducir el tráfico y las emisiones, pero llevar la cesta “a cuestas” en estos vehículos no es la mejor idea. Su volumen la hace inviable para su traslado en las dos ruedas y tampoco es aconsejable llevarla en el espacio de los pies de las scooter, porque no es un maletero y además pone en peligro la estabilidad de la moto. Sin olvidar la seguridad vial, la propia del conductor y la de otros usuarios de la vía.

Acomoda bien la cesta en el asiento, no en el maletero

Que no den conversación o no interactúen, no quiere decir que la cesta de navidad no tenga sus derechos. Por ello, es importante llevarla bien sentada y mejor en el asiento trasero. En el maletero corre el riesgo de volcarse o de golpearse en alguna maniobra o en cuesta. Además, es probable que por volumen no pueda ir en el espacio donde van los pies dentro del habitáculo y, aunque cupiera, evitaría poner en práctica el siguiente consejo.

Ponle el cinturón

Las prisas no son buenas compañeras (las cestas sí). Por lo tanto, mejor tomarse tiempo en acomodarla bien atrás y ponerle el cinturón de seguridad, a falta de un equivalente para las cestas de las sillitas infantiles. Un frenazo puede hacer que la cesta de Navidad se convierta en un proyectil. Eso sí, poner el cinturón con suavidad, porque si cruje, el turrón duro se convertirá en blando. 

Conduce suave

Las ganas de enseñar la cesta de Navidad no deben ser sinónimo de prisas al circular. La cesta de Navidad no se va a ir (siempre y cuando le hayas puesto el cinturón de seguridad) ni va a caducar. Por lo tanto, es fundamental conducir suave, evitar frenadas y giros bruscos. En caso contrario, tocará buscar el tarro de paté debajo de los asientos. 

En caso de volcar la cesta, no recolocar en marcha

Si aún con todos estos consejos, el conductor decide llevar la cesta a su libre albedrío, es probable que vuelque y, por tanto, se armará el belén dentro del habitáculo. En ese caso, lo mejor es frenar en un lugar seguro, bajarse, volver a poner todo en su sitio y, ahora sí, tomarse en serio la lista de consejos. En ningún caso es recomendable tratar de recolocar la cesta si esta se mueve o algún producto se cae mientras se circula. Perder la visión y la concentración pueden resultar fatales.