Las alquiladoras aportarán este año al mercado de VO la mitad de coches, 71.321, que en 2020, resultado de los esfuerzos que están realizando las compañías para asegurar vehículos y garantizar la disponibilidad de flota a sus clientes, dada la reducción de coches que ha sufrido el sector, según datos de MSI para Aneval, la asociación que representa a más de la mitad del mercado del rent a car.
Una tendencia que seguirá en 2023, con una aportación prevista al mercado de ocasión de 74.835 vehículos, lejos de los 144.824 que llevó al VO en 2020 cuando el rent a car funcionaba a pleno rendimiento.
Aneval recuerda cómo la escasez de vehículos ha obligado a las alquiladoras a activar varias palancas simultáneamente para paliar un problema de origen global como es la falta de coches por la crisis de semiconductores y que puede extenderse hasta 2023.
Una de las medidas ha sido alargar el tiempo que los rent a car tienen los coches en propiedad (de media en 9 meses) en lugar de desflotar, con el riesgo y coste financiero que supone. También se han renegociado los contratos de buyback, dado que el 90% de la flota proviene de ellos.
Por otro lado, debido a la carencia de vehículos nuevos, las alquiladoras han recurrido de manera puntual a otros canales de compra como la importación, que este año experimentará un incremento del 32%, según Sumauto.
Por último, los fabricantes siguen multiplicando conversaciones con los fabricantes, con el fin de tener visibilidad sobre los plazos de entrega y poder planificar con tiempo, tener producto y garantizar la disponibilidad de flota a sus clientes. Todo ello además en medio de la temporada de verano donde no se entiende turismo sin movilidad, especialmente en las islas.
Desde Aneval se pide a los fabricantes que mantengan la misma cuota de mercado de antes de la pandemia, por ser un elemento clave para el sector turístico en España, especialmente para la distribución territorial del gasto. Las compañías de rent a car son un valor estratégico para las marcas al representar el 20% de sus ventas, además de ser una pieza clave en el sistema de distribución de los vehículos.
“El objetivo de las empresas de rent a car es satisfacer la demanda pese a las dificultades para la compra de flota y parte de la solución ha sido abrir nuevos canales de compra y vender menos coches, pero siempre manteniendo una flota en condiciones óptimas de servicio y con las máximas garantías de seguridad y calidad”, explica Tobias Zisik, presidente de Aneval.